Vecinos del barrio Santo Domingo de Vallemí avisaron a la policía tras percibir un nauseabundo olor que despedía del pozo de la casa de la mujer, de nombre Laura de 27 años de edad, quien aparentemente habría arrojado a su bebé en el lugar.
Agentes de la comisaría 16 acudieron hasta el lugar donde fueron atendidos por don Florentín D., de 61 años. El hombre confirmó la información y acompañó a los agentes hasta el fondo de la casa, donde encontraron al bebé.
El cuerpo fue llevado hasta la morgue del Centro de Salud de Vallemí, donde el doctor Luis Areco ofició de forense y tras la inspección determinó que el feto presenta una descomposición avanzada con hinchazón en la cabeza, el rostro y el tórax. El abdomen tenía pérdida epitelial y otras lesiones en hombro, antebrazo y ambas manos y pies, con rigidez cadavérica en toda parte de la cabeza.
El médico mencionó que el feto era una niña de aproximadamente de 38 semanas de gestación (a término).
Tras el procedimiento, los policías acudieron hasta el centro de Salud donde procedieron a la detención de la madre, quien se encontraba en estado delicado, por lo que fue trasladada al hospital Regional de Concepción para una atención especializada.
El fiscal Fredy Arnaldo Fernández investiga a la mujer por un supuesto hecho de aborto inducido.