El fiscal de delitos ambientales, Andrés Arriola, abrió una carpeta fiscal para investigar un supuesto caso de caza furtiva de animales silvestres que se habría registrado en la zona chaqueña. Las primeras evidencias recabadas indican que presuntamente agentes de la Policía Nacional tendrían participación en el hecho dado que incluso se habrían encontrado los animales carneados y colgados en la comisaría de la localidad de Tte. Irala Martínez, departamento de Boquerón.
Arriola dispuso la apertura de la carpeta fiscal, se realizaron las primeras diligencias en este caso e incluso ya se habrían identificado a los presuntos autores del ilícito. El Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES) realizó la denuncia ante el Ministerio Público tras una investigación sobre el hecho de caza furtiva, a partir de imágenes fotográficas y filmaciones a las que accedió.
Varias especies endémicas del Chaco y en peligro de extinción se visualizan en las imágenes que fueron presentadas a la Fiscalía. Cabe mencionar que los registros audiovisuales fueron entregados al MADES, lo que desencadenó una rápida respuesta por parte de la Dirección de Fiscalización Ambiental Integrada, con apoyo de la Dirección de Asesoría Jurídica y Dirección de Vida Silvestre, identificando entre las especies afectadas: Tagua (Catagonus wagneri) especie endémica del Chaco y en peligro de extinción; venado o guasú (Mazama sp.); tapiti boli (Dolichotis salinicola), yacaré (caiman sp), teju guasu (Salvator sp); carpincho (Hydrochoerus hydrochaeris) y Tapir o mborevi (Tapirus terrestris).