La directora de una escuela de Ypané niega denuncia sobre supuesta agresión que derivó en lesión grave
La directora de una escuela de Ypané, María Vallejo, negó categóricamente la denuncia presentada por una madre, quien sostiene que su hijo de 8 años perdió un testículo tras recibir una patada de un compañero de la misma edad. La mujer afirma que las autoridades educativas intentaron encubrir lo ocurrido, algo que la institución rechaza.
Según Vallejo, los datos aportados por la madre no coinciden con los registros de la escuela. “La mamá en ningún momento denunció un hecho de esa naturaleza”, aseguró en entrevista con el canal GEN. Explicó que sí hubo un incidente el 20 de octubre, cuando el niño afectado se cayó tras tropezar con un compañero. La docente intentó comunicarse dos veces con la madre sin éxito y luego avisó al padre, quien mencionó que el menor también presentaba un fuerte cuadro gripal. Ese día, el niño fue retirado con normalidad y solo refirió dolor de cabeza.
La directora agregó que la versión de la mujer cambió al señalar el 24 de octubre como fecha de la supuesta agresión, pero sostuvo que el alumno señalado como agresor no estuvo presente ese día. “Tiene ausente. Suele faltar por sus terapias con psicólogo y neurólogo”, expresó.
La institución indicó que la madre recién se presentó el 31 de octubre, alrededor de las 17:00, con una orden de ecografía urgente y alegando que su hijo tenía dolor testicular. Fue entonces cuando manifestó por primera vez que “le lastimaron”. Posteriormente, el padre informó que el niño sería sometido a cirugía y que existía riesgo de pérdida de un testículo, hecho que finalmente ocurrió.
Vallejo señaló que la docente mantuvo contacto permanente con la familia, incluso visitó al niño en Acosta Ñu, donde fue informada de que la cirugía había salido bien y que podría recibir el alta. El lunes siguiente, la madre presentó un reposo médico de siete días.
La directora no descarta que el menor haya sufrido un golpe, pero insistió en que no se produjo en las fechas mencionadas ni con el niño acusado. “Una patada en los genitales causa un dolor que la profesora hubiera notado. En esa fecha no se registró nada. El niño siguió viniendo normalmente el 24 y 25”, afirmó.
También negó que la docente haya pedido a la madre guardar silencio sobre el caso. “Es imposible. El protocolo exige avisar de inmediato”, enfatizó.
La familia del presunto agresor también rechaza la acusación
La madre del niño señalado relató que su hijo niega rotundamente haber golpeado a su compañero. Explicó que, al enterarse de la cirugía, se comunicó con la madre afectada y se ofreció a ayudar económicamente. “En ningún momento me dijo que culpaba a mi hijo. Me agradeció que me preocupe. Recién el lunes me entero de que lo estaban culpando”, sostuvo.
