Larissa Riquelme volvió a estar en el centro de la atención mediática tras salir en defensa de Jonathan Fabbro, su pareja, quien cumple una condena de 14 años en Argentina por abuso sexual infantil.
Según trascendió, la influencer continúa visitándolo una vez al mes en la cárcel conocida como «la cacerolita», lo que generó especulaciones sobre un posible acercamiento sentimental. Las reacciones en redes sociales no tardaron en llegar, luego de que una cuenta deportiva compartiera imágenes del exfutbolista durante sus años de gloria.
Los comentarios negativos no se hicieron esperar y muchos usuarios mezclaron su carrera futbolística con los hechos judiciales por los que fue condenado. Riquelme respondió con fuerza y defendió su postura, asegurando que la verdad aún no fue contada en su totalidad. «Escuchalo, vas a saber qué fue lo que pasó con pruebas en mano», escribió la modelo, sugiriendo que pronto saldrá a la luz una versión distinta de los hechos.
La firmeza de Larissa al sostener la inocencia de Fabbro generó tanto críticas como apoyo. Mientras algunos cuestionan su postura, otros aplauden su lealtad. La influencer no solo mantiene su cercanía con el exdeportista, sino que además insiste en que “lo que está escrito” en el expediente judicial podría no coincidir con lo que la opinión pública cree. El caso, sin duda, vuelve a poner bajo la lupa el cruce entre la justicia, la exposición mediática y la vida privada de los famosos.
