Paraguay, un territorio rodeado de tierra, sin salida al mar, pero rico en elementos naturales, debe dejar de mirar sus bosques, agua y biodiversidad solo como “recursos naturales” y empezar a verlos como activos estratégicos, con valor para la seguridad
nacional y la geopolítica.
Es el planteamiento de José Alvarenga, ambientalista, actual jefe del Área/Sector
Medio Ambiente de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY). y miembro del grupo
de activistas ambientales Fuerza Verde. El referente instó a la sociedad a mirar las
riquezas naturales desde la perspectiva biogeoestratégica.
“Necesitamos mirar nuestros recursos naturales desde una perspectiva
biogeoestratégica, es decir, entender que no son solo riqueza ecológica, sino activos
estratégicos para nuestra seguridad, nuestra economía y nuestro posicionamiento en
el mundo”, mencionó. Esto, tras la serie de comentarios alentadores e inspiracionales por parte de
extranjeros sobre Paraguay, luego de que se haya realizado el Mundial de Rally
Paraguay 2025, que volcó las miradas globales en el país debido a su abundante
riqueza natural.
Hay que mencionar que Campeonato Mundial de Rally (WRC) generó ingresos de
unos USD 50 millones, pero para Alvarenga no se trata solo de ese impacto
económico que representa, porque el evento mostró al mundo el producto Paraguay
en imágenes.
Sus paisajes únicos que divisaban a los automóviles en medio de la polvareda, de la
tierra roja, abundante naturaleza y los característicos tajy rosas. “Esto atraerá más
gente que quiera venir a invertir, además de la energía limpia y mano de obra barata
que ya es conocido”.
José resume la propuesta en que sin bosques no habrá agua, y sin agua no habrá
energía o alimentos. Lo puso en contexto atendiendo a la crisis mundial de energía
y agua que se avecina para el 2030, por lo que lo más que importante es seguir
generando cultura ambiental y cuidar de los bosques.
“Con el reciente WRC, el mundo conoce estos hermosos paisajes que además de su
belleza contribuyen enormemente a nuestra economía y calidad de vida. Eso es lo
que producimos para el mundo, que tomamos, que respiramos y cuanta energía
generamos”, expresó Alvarenga.
Por consiguiente, Paraguay debe valorar sus bosques, su agua y su biodiversidad
desde una mirada biogeoestratégica; no solo como patrimonio natural, sino como
bienes estratégicos que sostienen la economía, y definen la seguridad y lugar en el
mundo”, agregó.
Para el ambientalista, ya no basta con ver los recursos naturales solo como riqueza
ecológica o económica, sino que hay que entender su rol estratégico para el país o la
región, porque tales aspectos son clave para la seguridad alimentaria, energética y
del agua.
En este sentido, ejemplificó al Acuífero Guaraní o el Chaco como reserva de agua y
biodiversidad, recursos que deben ser considerados como activos estratégicos que
determinan el futuro y la posición del país en el mundo, finalizó.
