La cadena de minimercados Biggie, sancionada por vender productos vencidos con etiquetas falsas, advirtió que podría suspender los contratos laborales de sus trabajadores y no descarta iniciar acciones legales contra funcionarios y ministros que ejecutaron la medida sanitaria.
José Fernández Zacur, asesor externo de la empresa, calificó la disposición de la Dinavisa como una “grosería jurídica sin precedentes” y expresó su esperanza de encontrar una solución rápida.
> “Si esto se soluciona rápido, nosotros nos vamos a ver obligados a solicitar la suspensión del contrato laboral de las personas. ¿Qué van a hacer adentro?”, declaró en entrevista con ABC TV.
Fernández Zacur sostuvo que la Dinavisa probablemente aplicó criterios propios de la intervención en medicamentos, donde un solo producto puede contaminar al resto. No obstante, aseguró que existe un compromiso para realizar una reinspección en la fecha.
El asesor advirtió que, aunque no necesariamente se trate de delitos, la ley prevé acciones contra los supuestos excesos de funciones.
La sanción afecta a las 260 sucursales de la cadena, suspendidas temporalmente tras detectarse productos sobreetiquetados con fechas de vencimiento posteriores a las originales. La medida se aplicó de forma general porque una misma fraccionadora realiza el trabajo para todos los locales