El esquema consiste en que los cheques para obras vecinales queden en manos de funcionarios de la comuna. Los involucrados hacen gala de su buen vivir en redes sociales.
Una nueva denuncia por lesión de confianza y apropiación se suma al prontuario del intendente de Ñemby, Tomás Olmedo, quien está en el ojo de la tormenta por supuestamente direccionar el cobro de cheques millonarios para obras vecinales a funcionarios de la comuna. En algunos casos, los involucrados se hacían pasar por miembros de las comisiones vecinales para acceder a los fondos.
Es el caso de Javier Luis Villalba Baéz, funcionario municipal y exintegrante de la comisión de Obras de la Municipalidad, quien llegó a cobrar G. 214.204.200 que Olmedo había destinado a la Comisión Vecinal Pro Empedrado San Francisco.
De acuerdo a la denuncia impulsada por la Contraloría Ciudadana de Ñemby, una asociación civil que opera en la ciudad, el cheque fue endosado por la Comisión Vecinal Pro Empedrado San Francisco a favor de la empresa Mbarete Impor Export, pero habría terminado en manos del joven funcionario. Mientras tanto, Villalba Báez exhibía en sus redes sociales fotos con dólares, autos y dólares, es decir, rodeado de opulencia y regalos gracias a su juventud y su cercanía con el intendente.
Los datos fueron suministrados al Juzgado de Sentencia N°7 de Capiatá -a cargo del juez Rodney Ramiro Rejalaga- a raíz de la querella presentada por Olmedo en contra de Agustín Scorza, director de un sitio de noticias de Ñemby, por calumnias y difamación tras revelar casos de corrupción en la administración municipal que superan los G. 600 millones.
«En el proceso de rendición de cuentas, la comisión presentó solo lo que corresponde a ingresos, omitiendo la justificación de los gastos con facturas legales, lo cual no solo constituye una grave irregularidad administrativa, sino que facilita la evasión impositiva por parte de la empresa adjudicada», reza la denuncia de la Contraloría Ciudadana.
La asociación apuntó que que los hechos punibles que podrían conjugarse serían los de lesión de confianza y apropiación indebida, abuso de funciones públicas, malversación de fondos, tráfico de influencias y asociación criminal.
De acuerdo a la denuncia impulsada por la Contraloría Ciudadana de Ñemby, una asociación civil que opera en la ciudad, el cheque fue endosado por la Comisión Vecinal Pro Empedrado San Francisco a favor de la empresa Mbarete Impor Export, pero habría terminado en manos del joven funcionario
Al igual que una decena de comunas bajo administración colorada, la Cámara de Diputados encajonó la solicitud de intervención y destitución de Olmedo por serias denuncias de irregularidades, sin contar el caso de abuso sexual de menores, que el intendente niega y achaca a una operación de sus rivales.
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En uno de los casos se investiga a Hugo Del Valle, exdirector de Obras de la Municipalidad, y a Marcos Meza, responsable financiero de la comuna, por un llamado para realizar mejoras viales por doble remuneración, donde el daño calculado es de G. 700 millones. En todas sus declaraciones, el intendente insiste en que las acusaciones son parte de una vendetta política por parte de equipos disidentes de su administración.
A pesar de las serie de denuncias, el intendente sigue blindado por el comando de Honor Colorado y la cámara baja, al punto de que su reelección es aceptada por el cartismo. De hecho, Olmedo se reunió esta semana con Basilio «Bachi» Núñez, titular del Congreso. La Junta Municipal de 12 miembros se encuentra dividida en cuatro bandos. Solo dos colorados le siguen apoyando. Los demás grupos le soltaron la mano, ya que su administración resulta insostenible ante las reiteradas denuncias de manejos sospechosos.