La fiscal, Ruth Benítez, quien lleva el caso del empresario Luis Montanaro, confesó a la prensa que está recibiendo amenazas de personas conocidas en los medios, porque temen que sus imágenes se “ensucien”.
Aparentemente estos “famosos” fueron a los encuentros sexuales en donde eran domados en el club sexual. En dicho lugar compartían parejas, probaban cosas nuevas y eso preocupa al grupo de personas que están en el ojo público.
“Estoy protegida por Dios”, finalizó la agente fiscal, afirmando que teme por estas amenazas.