Un niño de 12 años, quiso traer huevos de su gallinero en la compañía Carro Cué de departamento de Canindeyú para comer huevo frito, y fue cuando tocó el alimento que agarró un alambre que estaba electrificado, al parecer producto de un temporal del día anterior y recibió una mortal descarga eléctrica.
Inmediatamente sus familiares lo llevaron al Hospital de Curuguaty pero lamentablemente los trabajos de reanimación no funcionaron.