El Consejo Directivo del Centro de Arbitraje y Mediación del Paraguay (CAMP) de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios de Paraguay (CNCSP) rechazó la denuncia penal presentada por prevaricato a Diego Moreno, nuevo integrante de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) y otros árbitros miembros del CAMP.
El Centro de Arbitraje y Mediación del Paraguay (CAMP) de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios de Paraguay (CNCSP) rechazó categóricamente la querella criminal por prevaricato presentada contra los árbitros Hernán Casco, Juan Bautista Fiorio y Diego Moreno, quienes integraron un tribunal arbitral en un proceso administrado por la institución.
A través de un comunicado, el CAMP calificó la denuncia como un grave ataque a la independencia del arbitraje en el país, señalando que este mecanismo de resolución de controversias está reconocido constitucionalmente y es de carácter vinculante para las partes que lo eligen.
El conflicto se originó tras la anulación de un laudo arbitral por parte de la justicia ordinaria, en una decisión dividida basada en la valoración de la prueba. Posteriormente, la parte querellante presentó una acción de inconstitucionalidad contra la anulación, la cual fue rechazada, quedando firme el fallo judicial. Sin embargo, tras agotar la vía judicial, la parte afectada impulsó la querella penal contra los árbitros.
“El uso del derecho penal como mecanismo de presión sienta un precedente riesgoso para la comunidad jurídica y empresarial, desvirtuando el arbitraje y afectando la seguridad jurídica”, advirtió el CAMP. Asimismo, reafirmó su respaldo a los árbitros involucrados, asegurando que actuaron con independencia y conforme a derecho.
El organismo instó a la comunidad jurídica, empresarial e institucional a defender la autonomía del arbitraje y evitar su instrumentalización como herramienta de represalia contra decisiones arbitrales.