La versión del Senado establece un alza del 16% al 40% y crea un arancel especial de G. 1.500 por cada cajetilla de cigarrillos vendidos, mientras que el estamento asesor, dispuso que la tasa de incremento sea como mínimo de 18% y un máximo del 22%.

El diputado Romero Roa sostuvo que el último reajuste de impuesto para el sector tabacalero se dio hace poco más de un año. Consideró que el aumento de tributo debe hacerse de manera gradual.

“Nosotros creemos que también hay que aprobar un incremento, aunque no en la dimensión que tiene la media sanción, sino hacerlo gradualmente. Recordarán que el impuesto estaba en 13% hace un año y medio, luego subió al 16% y con esto iría al 18%. Estos 5 puntos porcentuales representa alrededor del 40% de suba de este impuesto en menos de año y medio”, detalló el parlamentario.

Recordemos que durante una reunión conjunta de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Presupuesto, el viceministro de Hacienda, Humberto Colmán, señaló que el incremento excesivo de impuesto para un sector podría impactar negativamente en la economía, en el sector productivo y en la generación de empleo.